EL CLUB DE LOS PERDEDORES

MENSAJE DE UN MIEMBRO HONORARIO

Qué difícil es ser adolescente. Qué difícil encontrarse y luego mantenerse fiel a lo que uno cree, a lo que uno es. Y si, además, uno es diferente, la lucha puede ser tan ardua que dan ganas de rendirse. Yo viví esto en mi adolescencia y ustedes lo viven hoy; lo sé porque me lo han contado, me han compartido sus confusiones, retos y triunfos; Alexa, Adrián y Armando, los miembros de este Club, tienen caras de chicos y chicas con los que he platicado: la lucha de ellos, la mía y la de ustedes, es la misma. Todos luchamos por nuestro derecho a existir, a ser con todos nuestros colores tanto en el mundo virtual como en el de carne y hueso, aunque los adultos no entiendan que son igual de reales y que en ambos hay aliados, enemigos y guerras. Siempre está la tentación de cambiar, de “adaptarse o morir”, pero ¿qué perdemos en el camino? Y, ¿vale la pena vivir así, mutilados? Alexa se hace esta y muchas otras preguntas, Alexa se enfrenta a un mundo hostil en que ser ella no es sencillo ni aceptado, pero pronto encuentra que no está sola en ese mundo. Encuentra, además, la manera de ser más de una persona, pero esta es un arma de dos filos…